viernes, 22 de abril de 2011

Desde entonces, te hospedas en mi cuello infinitamente.

En el ambiente solo se respiraba euforia y deseo.Ella se hayaba allí, desde temprano, tratando de reservarse una posición para tenerlo más y más cerca, mientras se fumaba todos los cigarrillos que en tres meses había abandonado.
Con el abrir de las puertas, y dos cajetillas e intentos de filtro danzando a su alrededor, su corazón percibió el éxtasis que viviría, pero jamás con tal gravedad como la que finalmente conllevaría al infarto.

Humo, humo y más humo. Lágrimas cálidas, abrazos eléctricos, beso ajustado al microsegundo. Un solo objeto que probaría lo físico, pero mil recuerdos que sin anotación previa serían efímeros.
-Tan solo nos quedará Barcelona-, susurra el viento desde entonces con ecos que entonan un requiem sonoro.

[Peter Doherty - 180411]




( Siento mi ausencia, he estado muerta y aún carezco de vida)

jueves, 17 de marzo de 2011

Camuflaba su astucia bajo sombrero y gabardina.

Nunca tuve la paciencia suficiente para cualquier cosa ,desde la papiroflexia, hasta algo tan cotidiano como la fritura de un huevo. El simple hecho de esperar podía amargar mi existencia sin dificultad alguna, pero jamás lo llegué a ver como un defecto, es más, encontraba defectos a la forma de ser de todos y cada uno de los individuos que se cruzaban en mi camino, menos en la mía. Pero como en todo lo bonito e iluso, siempre llega el ser que se dedica a escachar tus teorías y a dejar tu figura de '' persona con un grado de ignorancia básico'' en ''ignorante a secas''.
Transcurrió en una de esas asquerosas mañanas de mayo. Me encontraba ya sentada en el asiento del metro a cuatro paradas de mi destino, con la mochila ocupando el sillín del acompañante, para evitar, de este modo, cualquier tipo de acercamiento hacia mi persona. Subió entonces él, el típico sesentón con aires bohemios, sombrero y expresión inocente. Dirigiéndose a mí de este modo:
- Pequeña, ¿está ocupado este asiento?
-No- respondí secamente con una cara que contradecía mi respuesta.

-Cuando me da por pensar de noche en mis defectos me quedo dormido inmediatamente- comentó como quien empieza la típica conversación de extraños que únicamente tienen en común el espacio y tiempo elegido para utilizar el transporte público.

No hubo ninguna palabra más en el corto trayecto que recorrimos, pero, si algún día nuestros caminos vuelven a encontrarse, jamás sabrá el tiempo que demoró dicha frase en mi mente. Eso sí, desde entonces, siempre llevo sombrero.

sábado, 12 de marzo de 2011

El algodón de azúcar envidia su dulzura casi tanto como yo.

El pequeño J. añadía pinceladas a los mundos etéreos de muchos con una dulzura prácticamente imposible de alcanzar si tu corazón así no lo sentía. Con su sonrisa dibujaba las fronteras de la realidad inalcanzable,pero te tendía una mano,eso sí, para que las conocieses a su lado.
Su piel olía como la tarta de manzana mejor preparada, y sus ojos del color del chocolate, poseían una profundidad incalculable, que llevaba ni más ni menos, al centro de su ser.
De su mano brotaban cantidad de mundos e historias en los que cualquier efímero ser quería adentrarse, si sus conocimientos de la cruel realidad eran mínimos. Triángulos, rojos frambuesa, adoración por los pequeños mapaches y una cabellera azabache eran los rasgos que me había permitido conocer, anteponiendo su preocupación por mi sonrisa.
Yo quería que supiese que algún día podría volar a donde sus sueños le condujesen, que con su corazón no habría puerta que se le cerrase y si alguna cometía dicho atrevimiento, siempre quedaría una ventana que jamás le negará el paso.
Nunca nadie pensó que la ternura podría ser ofrecida de manera tan directa; ahora yo lo pienso y no cabe espacio para las dudas en mi pequeña cabeza.Espero que en la tuya tampoco, adorable mío.

miércoles, 9 de marzo de 2011

Retroceder y no soltarte nunca, tonta.

En la lúgubre habitación donde actualmente me hospedo sólo hay hueco para el silencio y los arrepentimientos. ¿Qué se puede esperar de un sitio en donde las toallas no son cambiadas? Nada,absolutamente.
¿Recuerdas nuetro primer cigarrillo? Es un momento que he anhelado, cordialmente.Nos creíamos duras por el simple hecho de pudrir nuestros pulmones. Pero si fuese por retroceder, otro, otro y otro.
Añoro los momentos que jamás viviremos juntas, añoraré esa borrachera que jamás tendremos y esos pensamientos filosóficos que nunca compartiremos.
Espero que te cunda el por qué de nuestra separación. Ahora no tengo tiempo para más reflexiones sentimentales, me toca llamar a recepción para que repongan el jabón de una vez.


domingo, 6 de marzo de 2011

La ausencia nunca fue tan táctil.

No quiero escribir la típica entrada, no quiero renunciar a tan solo una palabra, quiero recolectar todos los momentos vividos y por vivir, almacenarlos e incluso desterrar algunos bajo llave sin un mínimo contacto con el exterior.
Quiero reducir mi grado de ignorancia diario, crecer por dentro, soñar por fuera.
Respirar cada vocanada de aire como si de la última se tratase. Amargar mis penas en el alcohol o en un simple hombro que me sirva de apoyo en el día a día. Sonreir, ser correspondida.
Enseñarte la correcta pronunciación de una palabra inglesa; que me enseñes cualquier cosa por estúpida o efímera que te parezca.
Recorrer caminos a ciegas, siendo tú, mi guía y mi ser, mi esencia y mi propósito.
Lamentar lo pasado, echar de menos lo nunca experimentado.
Perderse en la obviedad.
Porque algunos corremos ya que nunca nos han enseñado a andar.Porque algunos vivimos en la ignorancia o con credibilidades propias a cada individuo;porque en ocasiones todos formamos parte de un colectivo que nos puede llevar hasta nuestra consciente destrucción.

''The world can be a very big place so be yourself don't get out of place.''
Luke Pritchard.

Para concluir, permitidme un capricho,algo que me resume, un todo y un nada:

'' Para cantar primero hay que abrir la boca. Hay que tener dos pulmones y algunos conocimientos de música. No es necesario tener un acordeón, ni una guitarra. Lo esencial es querer cantar. Así, pues, esto es una canción. Estoy cantando.''
Henry Miller

lunes, 21 de febrero de 2011

Me dijo, ''Pequeña, ten fe'', pero nunca respondió en qué.

Levántate, hace un día expléndido.
Lava tu cara, hazle una mueca al mundo.
Escoge tu jersey de punto favorito y cálzate tus botas, no es momento para cavilar entre el verde guisante y el azul aguamarino.
Es hora de perderse en las calles, hora de paralizar el reloj para que únicamente tú tomes el control, hora de lo que te dé la gana.
Que no te importe nada; que no te importe nadie.
Deja de comprar sus cigarrillos.
Deja de impregnar tu habitación con su perfume.
Deja todo atrás, no quieras continuar más este cuento de hadas polvoriento.
Tú eras como la heroína, no una droga, no, cara. Pero hemos llegado a tal punto en el que hablando de sexo te asocian con la valeriana. No es justo si lo único que se te daba mal era querer, ¿no crees? Simplemente es triste. Aun así, no te preocupes, tu cara es el menor de tus problemas.

lunes, 14 de febrero de 2011

Podemos calzarnos las botas y bailar country, si lo prefieres.

No me agarres de la mano, sabes que a la de tres solo habrá aire sujetando la tuya.
No me pidas que razone, cuando intuyes que nunca lo he hecho.

Afirmo que existen momentos en los que deseas encontrarte con ese alguien que hará que la soledad no parezca tan atractiva como la pintan; yo no me encuentro en ese período todavía.
El libertinaje destaca bañado en luces de neón que nunca tuviste y si no fue así, justifiquémoslo como mi momento de embarque hacia esa dirección en la que todo se realiza sobre la marcha, en la que todo se resuelve de motel en motel hasta alcanzar la ruta 66. En ese punto me quitaré los zapatos y bailaré agarrada de la lujuria al son de un vals sin sentido.
Puede que mis ojos verdes te parezcan tan dulces como el tequila. Después de todo, nadie te pidió que te fijases en ellos.
Yo veo el sol naciente mientras tú lo ves poniente
No hay ni un leve grado de lástima, lo siento.

martes, 8 de febrero de 2011

La última rosa inglesa.

Porque siempre hay canciones que despiertan lo que parecía muerto en tu interior.



Ah sometimes you can’t change
There’ll be no place
Ce soir, disons chez moi
Enfin je compte de toi
Je te drague la rose mystique
Tu l’arroses mystique?
Ha, vas-y
C’est mon monde de soleil.

Pete Doherty.

miércoles, 2 de febrero de 2011

La elasticidad de un chicle no es infinita.

Si tuviese que escoger un momento de los numerosos que vivimos, no sabría.
Si tuviese que elegir alguno de tus besos, te sorprenderías, vivo en un mundo de indecisiones con sabor a menta y de mentiras de tacto rugoso.
Mis vicios tienen que ver contigo.
Mis tropiezos dependen de ti.
Mi alegría se caracteriza por las esposas que la unen a la tuya.
Tú eres como el bambú, yo soy la tormenta.

Disfruto con las idioteces e imprudencias que me hacen fumar cigarrillo tras cigarrillos.
Sufro con la opacidad de nuestras mentes trastornadas.
Si mis dudas fuesen almacenadas,un armario sería insuficiente.El caotismo ya forma parte de mi vida, así que no esperes clasificación alguna en esta peque
ña tormenta que brota de mi utopía inalcanzable.
Soy tu mundo paralelo, es hora de asumirlo como más allá de un simple concepto.


No estiraré más este chicle, no por ahora.

jueves, 27 de enero de 2011

Dime, ¿de qué color presenciaste el final?

No tengo ninguna historia que pueda ser contada, pero quiero escuchar la tuya. Dices que no puedes expresarla con palabras, por lo que agarras mi mano y me miras a los ojos.
En un ambiente de luces de neón y música, nadie se resiste a sonreir.
Sabes que si jugamos a este juego tienes todas las de perder.
No intentes probarme porque no tiendo a reaccionar bien, pero, para hacerlo más fácil, déjame ir a por una bebida y las cosas adquirirán cierta sencillez para ambos.
El tiempo no pasa, cuando no se le ve pasar.
Sinceramente, no recuerdo como acabé contándote historias tristes a cerca de mí misma, tampoco recuerdo cómo acabé confiando en ti, pero en ese momento, sabía que podía.
Supongo que predominaba algún tipo de intuición de los numeros fines de semana que pasamos tomando té en la cama.
Supongo que era feliz en tus boxers y en tu camiseta.
Supongo que no existía nadie en el mundo que te sustituyese.

sábado, 22 de enero de 2011

Dormir, siempre ayuda cuando no hay otro lugar a donde ir.

Me tienes donde quieres, pero una vez más, te diré que no me importa puesto que mi lengua ya se ha acostumbrado a mentir.
No me gustaría traficar con sentimientos, razón por la que no envidio el papel que desempeñas.
Mi consuelo; verte contra la pared.
Mi alegría; la desconozco.

Ponte en mi lugar.
¿Has sentido alguna vez que el mundo no es justo?
Si te identificas, aquí siempre serás bienvenido.
Sol
emos cantar canciones que evitan aguarle el día a tu mirada.
Nos deleitamos imaginando el Cielo, si es que existe, como un instante de sexo retenido.
Sonríe, llegó el momento de la pregunta; ¿qué es para ti un recuerdo; algo que se tiene o algo que se ha perdido? Si no sabes la respuesta aún te queda la almohada.


miércoles, 19 de enero de 2011

Tan realista como la sonrisa de las fotos escolares.

Sintiéndose con el ánimo algo más alto de lo habitual, decidió sentarse a escribir 14 cosas que la hacían feliz y enumerarlas según esas ideas brotasen de su cabeza de ese modo tan desordenado que encajaba con su concepto de orden.

1. Los días de lluvia o los que eran acompañados con neblina espesa.

2. Leer y creerse involucrada en la historia.

3. El sabor de aquellos labios fusionados con los suyos propios.

4. El estado zombie a la hora de zurcar la c
alle con los auriculares a punto de estallar en el interior de sus orejas.
5. Sentirse extranjera en su propia ciudad.
6. Aprender todo tipo de cosas que encajasen en su concepto de interesante.
7. Las carcajadas que producen dolor de estómago.
8. La reproducción de su canción favorita de la
semana encontrándose el ipod en modo aleatorio.
9. Superarse y superar lo que según su opinión, debía ser superado.

10. Recitar la escena de su película favorita como si del Buenosdías se tratara.

11. El palpitar de la ventana del messenger cuando eres tú quién saludas.

12. Descubrir que había personas para las que realmente ella era algo.

13. El momento en el que asumía la hipocresía y la conveniencia como quién hace que el agua descienda por su garganta.
14. Lo bien que sabía engañar y engañarse.

Lástima que no sea el momento de escribir las 14 cosas que harían que mi grado de felicidad no fuese ficticio o anti-materialista- pensó-.



domingo, 16 de enero de 2011

Una vida en cero coma.

El último sonido que oyó fue el boom de una bala. Tragándose sus palabras, sentimientos y emociones, dio media vuelta para no volver jamás.


miércoles, 12 de enero de 2011

Interpretación propia con una pizca de determinación.

Apagó su corazón a la vez que apagó el ordenador.
Su mente se fundió junto con el término decisión.
No más quiebres si de verdad existía algo de amor propio en su interior.
No más lágrimas si la dignidad alguna vez fue algo para alguien.
Quería vivir sin emociones que consiguiesen hacer variable su estado de ánimo.
Quería sonreír a su propio reflejo satisfactoriamente.
Dejar la hipocresía atrás.
Adornar con seguridad todo momento.
Pretender que sus pasos pareciesen más firmes que los de cualquiera.
No sentir miedo y disfrutar cada uno de sus placeres por mucho que fuesen perjudiciales.
Ser indiferente pero no pasar desapercibida.
¿Contradicción? No esta vez.
Avanzaba la película de su vida y no iba a tirar más momentos por la borda.